LA BARCA DE TOMARES Y LA PASARELA PEATONAL

lunes, 9 de mayo de 2016


Desde tiempos inmemoriales existió la “barca de Tomares” que era el medio de transporte más habitual para peatones que se desplazaban desde el aljarafe a Sevilla y viceversa. La evolución de los medios de transporte, hizo innecesaria esta barca que acabó desapareciendo allá por los años sesenta. Sin embargo el desarrollo de las nuevas carreteras  hasta transformarse en vías rápidas, autopistas, dio lugar a que a los peatones, las bicicletas y motocicletas de pequeña cilindrada les fuera imposible utilizarlas y por tanto le imposibilitaron el acceso a Sevilla por estos medios. A día de hoy nuevas formas de transporte o mejor dicho antiguas maneras están siendo rescatadas, dadas la masificación de la movilidad en coche, recuperándose de forma importante los desplazamientos en bicicletas y a pie.
Tomares ocupa el centro de la parte del aljarafe que conformará el área metropolitana de Sevilla. Tomares es el centro de la zona comprendida por San Juan de Aznalfarache, Mairena, Bormujos, Castilleja y Camas y además es el punto más cercano al “centro de Sevilla” de ahí que en otros tiempos fuera el camino más utilizado por ser el más corto a través de la barca para llegar a Sevilla.
Sin embargo, a día de hoy está pendiente de licitación una pasarela para bicicletas y peatones que va desde San Juan, más allá del antiguo puente de hierro, hasta Sevilla, a la av. Juan Pablo II y que al parecer salva mediante un puente a la SE-30. La gran cantidad de problemas técnicos de todo tipo, ha dificultando su construcción hasta la fecha. Así y todo la mayor dificultad que ofrecerá una vez construida, será la gran vuelta que tendrán que dar los vecinos de los pueblos anteriormente mencionado para poder acceder a la misma y que además, una vez cruzada, estar más lejos de Sevilla-centro que la distancia a recorrer desde Tomares, cruzando el rio,  al centro de Sevilla.
No debemos olvidar que el rio es el único obstáculo a salvar entre Tomares y la avenida de Coria en la capital, avenida que es la prolongación de la calle San Jacinto que a su vez, da acceso al puente de Triana. Esta hecho incluso el túnel para salvar la SE-30.  Si así fuera, en el acto de presentación de la pasarela San Juan-Sevilla de la pasada semana, además de los alcaldes de Sevilla, San Juan y Mairena, seguramente también habrían estado los de Tomares, Bormujos, Castilleja y Camas que suman casi cien mil vecinos. Esta carta es mi último intento para que los técnicos en la materia recapaciten y ubiquen la pasarela peatonal en el lugar que el sentido común y la menor distancia, determinante en los desplazamientos a pie y en bicicleta, aconsejan.
Faustino  Tomares.